Las diferencias entre los socios de una empresa pueden surgir por diferentes motivaciones, por lo que debe haber reglas claras para no poner en riesgo el futuro de la organización.

Es importante entender los problemas comunes que surgen para anticiparse o, si ya se ha desarrollado la discrepancia, saber cómo y cuándo abordarlos para continuar con el negocio.

Nuestro socio director, Héctor Torres, tiene una larga experiencia en la asesoría a empresas de diferentes tamaños y actividades económicas. Durante su trabajo ha visto como algunos negocios terminan sus operaciones por los conflictos entre sus socios fundadores.

“Es inevitable pelearnos con nuestra pareja, con nuestros hermanos y con nuestros socios. En el tema empresarial, cuando hay una disputa de socios y es irreparable, tiene que haber reglas claras que establezcan qué pasará con el negocio”, recomienda nuestro experto.

En primer lugar, nuestro especialista plantea la firma de un contrato de accionistas o un pacto de socios. “La empresa debe subsistir a pesar de que los socios no puedan llevarse entre ellos. Estas formas de cuidar a la compañía se pueden hacer mediante mecanismos contractuales para que sobreviva sin depender de la relación de sus accionistas”, afirma Torres.

Dichos contratos definirán los roles de los partícipes y se prevenir situaciones críticas, por lo que, el pacto de socios tiene como objetivo la estructuración de la organización, regular las relaciones entre los socios y terceros, determinar la manera de tomar acuerdos y establecer medidas y mecanismos para la resolución de conflictos.

Generalmente, un contrato de accionistas incluye algunas cláusulas como los roles que deben cumplir los socios; las directrices para determinar las remuneraciones; los compromisos de permanencia, confidencialidad, no competencia y no concurrencia; la aceptación de nuevos socios o la salida de los actuales; y mecanismos de resolución de conflictos.

En el caso de conflictos que se presenten de forma impredecible o aquellos que sean de mayor trascendencia, la solución más recomendable es la contratación de un mediador o de un tercero. Con ello, las partes concluyen un acuerdo sin acudir al sistema de justicia.

La tercera vía de solución será por medio de mecanismo de resolución de conflictos extrajudiciales, ya sea por medio de despachos legales o centros especializados en arbitraje. En última instancia, los socios deberán asistir a los tribunales con el acompañamiento de abogados especializados en la materia.